Hay algo imprescindible para poder adelgazar: querer hacerlo. Y aunque nos parezca una tontería, hay mucha gente que dice querer adelgazar pero que en realidad no lo desea en serio, hay algo que las paraliza, que les obliga a engordar y engordar sin parar.
No os voy a engañar, yo siempre he sido más de sala de fitness que de actividades dirigidas y el motivo es claro: no tengo ritmo y soy una patata. Sí, lo sé, seguro que muchas de vosotras pensaréis que soy una exagerada y que es imposible no saber seguir, como mínimo, un a clase de aerobic.
Una de las preguntas que muchas de las personas que están haciendo dieta tienen es: ¿qué puedo cenar para no engordar? Al fin y al cabo todo el mundo sabe que la cena debe ser la comida más ligera del día, tal y como dice la frase conocida de «desayuna como un rey, almuerza como un príncipe y cena como un mendigo».
No hno puedo adelgazaray nada más frustrante que intentar adelgazar y ver como todos tus intentos no sirven para nada. Todos podemos tener fuerza de voluntad, pero si no obtenemos una recompensa, la fuerza de voluntad y las ganas se desinflan
Adelgazar haciendo dieta es posible, pero es lento y en muchas ocasiones frustrante ya que cuando volvemos a comer con normalidad engordamos de nuevo. ¿Cómo podemos adelgazar de forma efectiva? Haciendo ejercicios aeróbicos para adelgazar no sólo bajaremos de peso sino que podremos mantenernos en nuestro peso ideal una vez hayamos llegado a nuestro objetivo.
Una de las cosas que preocupa más a todos aquellos que empezamos una dieta es no pasar hambre. Al fin y al cabo hacer dieta está bien, pero sentir los rugidos incómodos del estómago no deja de ser un fastidio. Aunque el mito de que para hacer dieta hay que pasar hambre está muy extendido, no es del todo cierto.