Saltar al contenido

Dieta saludable para adelgazar, los mejores consejos

Por mucho que nos guste pensar lo contrario, adelgazar sin mejorar nuestra alimentación es imposible. Como los milagros no existen, la pregunta que podemos hacernos es ¿cómo puedo llevar una dieta saludable para adelgazar? A veces no se trata de cambiar por completo todo lo que comes, sino variar algunas pequeñas cosas para que su aporte calórico sea, como mínimo, inferior. Si cambiamos para siempre la manera de cocinar, no hará falta que saltemos de dieta para perder peso a dieta. Simplemente comiendo bien y cocinando de la forma adecuada, nos podremos mantener en nuestro peso fácilmente.

Los mejores consejos para tu dieta saludable

Haz una dieta de cinco comidas diarias: aunque mucha gente piense que cuántas menos comidas haga, mejor, está comprobado que esto induce a que a la hora de comer comamos más y más ansiosos. Comer cinco veces al día nos asegura no pasar hambre y por tanto no llegar hambrientos a la hora de comer.
Adiós a los fritos: comer fritos es un pecado. Es más, dentro de una dieta saludable para adelgazar, comer fritos es impensable. El aceite rebaña todo tus alimentos en calorías, haciendo que algo aparentemente sano se convierta en una bomba calórica. No es lo mismo comer una hamburguesa a la plancha que comértela frita y lo mismo pasa con la verdura. Si coges unas acelgas y las pasas a la paella con medio litro de aceite llegarán a engordar casi tanto como unas patatas fritas del mcdonald’s. Así que ante todo, si quieres llevar una dieta saludable, debes decir adiós a tu freidora y sustituir la paella por la plancha o el vapor. Puedes echarle un poquito de aceite, claro, pero no la barbaridad de aceite que puedes llegar a utilizar en una paella.
Refrescos light: otra de las cosas que olvidamos con mucha frecuencia, es que las bebidas también tienen calorías. Hay personas que beben coca-cola todos los días sin pensar que los azúcares que lleva son tan perjudiciales como los de una tableta de chocolate. Si eres de los que necesita un refresco diario, al menos elije su versión light. Las bebidas light no engordan y saben prácticamente igual que la original.
Restringe la bollería prefabricada: si te apetece comerte un bollo un día, no pasa nada, pero intenta que sea fresco, de panadería, no de bollería prefabricada. La bollería embolsada suele estar llena de grasas saturadas y por tanto engordan bastante más que las que puedes encontrar en los bollos de la panadería.
No piques entre horas: y si picas, elige alimentos que no vayan a echar por tierra tu dieta saludable para adelgazar. En la sección de dietética de tu supermercado encontrarás un montón de productos bajos en calorías que pueden saciarte en un momento dado. Por ejemplo, si tienes hambre y no puedes esperar hasta la hora de comer, puedes comer una torta de arroz o maíz, algo de fruta o un yogurt desnatado.
Amiga de las verduras: las verduras ofrecen un mundo de posibilidades: en ensalada, hervidas, al vapor, al horno, de acompañamiento, etc. Comer verduras todos los días, ya sea para comer o para cenar es una buena forma de tener una dieta sana y equilibrada. Aunque no te entusiasmen mucho, te aconsejo que las vayas probando y encuentres esas verduras que son de tu agrado. A mí, por ejemplo, hasta hace poco no me atrevía a probar nada, ahora disfruto con los salteados de verduras, la alcachofa en todas sus formas, las ensaladas y el pisto de verduras. Poco a poco te vas acostumbrando a ellas, y no sólo eso, acabas encontrando algunas que no sólo te gustan sino que además te apasionan.